Soulmates

Sola. Esa fue la unica palabra que logró penetrar mi caparazón.



viernes, 12 de febrero de 2010

8.1 Invitacion

Mirándome fijamente mientras aclaraba mi garganta pensando en una explicación lógica para lo que había pasado…

-Simplemente oí que el auto se acercaba.- dije mirando a otro lado para que no me viera a los ojos, que siempre me delataban, sabiendo que era mentira y yo la peor mentirosa del mundo.

Lo miré por el rabillo del ojo y vi que me sonreía. Cada que el reía, no podía evitar sentirme feliz, como si su felicidad me contagiara.

-¿Qué?- pregunté ya que vi que seguía con la misma encantadora sonrisa de hace unos momentos.

-Me estas mintiendo.- dijo riendo.- Tus ojos.

-¿Qué hay de malo con mis ojos?- pregunté ofendida. El puso una mano en mi mejilla y me miró unos instantes.

-Son hermosos. Pero te delatan cuando mientes, Dest.- susurró, haciéndome sentir mareada, como si algo dentro de mí se estuviera derritiendo.

Me miró con ternura y cariño, mientras acariciaba mi mejilla. Yo me quedé paralizada, sintiendo el delicado rocé de su piel contra mi mejilla, dejando un rastro de calor por donde pasaba. Se acercó y besó mi mejilla para decir: - Es hora de irme, tus padres no se pondrán felices si llegan y estoy aquí.

-Mis padres están fuera de la ciudad.- tomé una almohada y me cubrí el rostro con ella, sintiéndome estúpida por haber dicho eso. Sonaba tan desesperada, y eso era pasarme de la raya. Sonrió complacido antes de acercarse y abrazarme, esta vez no volví a poner resistencia.

-Una pregunta.- dije tomando su muñeca para evitar que se marchara. El asintió con la cabeza y se sentó a mi lado. - ¿Por qué te quedaste conmigo, Lucas? Me refiero a mientras estuve desmayada. Me porté mal contigo, no debí haberte dicho que le creía a Craig…

-No te preocupes. Y me quedé por que no te quería dejar sola. No quería alejarme de ti hoy. Menos si estabas así. Era… Por si… Necesitabas algo.- dijo con las mejillas ruborizadas.

-Gracias. No me lo merecía. Pero gracias.- dije realmente agradecida.

-Te mereces eso y más. Te dejo mi número por cualquier cosa, ¿esta bien?- yo asentí con la cabeza y le di un pedazo de papel y un lápiz en los cuales escribió con letra perfectamente amoldada, una serie de números.

-No tienes por que preocuparte. Estaré bien.- pensé bien en lo que acababa de pasar cuando rozó mi mejilla y dudé sobre la verdad de mis palabras.

-No importa. Me puedes llamar a la hora que quieras.- dijo antes de salir por la puerta de mi habitación. Puse una mano donde había besado mi mejilla mientras una sonrisa se curvaba en mis labios y vi por la ventana como subía a su auto y se marchaba, preguntándome si estaba bien sentir esto por el…

Me quedé un rato viendo por la ventana el camino por donde Lucas se había ido mientras pequeñas gotas comenzaban a cubrir la ventana. El teléfono sonó y yo pegué un brinco del susto. Lo tomé y el identificador señalaba un número que yo ni siquiera conocía. Pero de todas formas contesté por pura curiosidad.

-Emm… ¿Bueno?- pregunté suavemente.

-¿Destiny? ¿Eres tu?- preguntó una voz masculina.- Hola, soy Jake.

-¿Jake? ¡Hola! –lo saludé alegremente. - ¿Se puede saber a que se debe el honor de tu llamada?

-Emm... si, supongo.- dijo el, mientras yo me imaginaba su rostro completamente rojo mientras hablaba.- Me preguntaba si tenías planes para el próximo fin de semana.

-Creo que no. – contesté nerviosamente. ¿Qué querrá pedirme?

-Es que habrá una fiesta en Raleigh y me preguntaba si querrías ir. Iríamos, tu, yo, Cam, Shane y todos los del grupo.- dijo el. Podía oír la sonrisa en su voz.

-Supongo que si mi prima y su novio me dan permiso… ¡Claro que te acompaño! –oí un suspiro desde la otra línea, como de alivio y no pude evitar sonreír.

-Bueno, supongo que te veo el lunes.- dijo el.

-Esta bien. Nos vemos.- dije, para colgar el teléfono pensando que pasaría en esa fiesta….



El fin de semana pasó normal. Ever y Damen me llevaron a comer y cenar sábado y domingo, ya que no tenían humor de cocinar. Fuimos al cine, y de compras, pero Ever se vuelve loca en las tiendas por lo que yo y Damen nos perdimos y fuimos por un helado, pero cuando volvimos, no nos habló durante 3 horas, enfurruñada por haberla dejado sola. Damen paso todo el día tratando de disculparse hasta que ella por cuenta propia se abalanzó sobre el para besarlo. Me imaginé como seria amar y ser amado así y suspiré con resignación, diciéndome que tal vez nunca encontraría un amor como el suyo.



El lunes al llegar a la escuela, el día estaba soleado, con el cálido sol abrazándome de una forma que me hacía sentir muy bien. La ligera brisa jugaba con las escasas hojas de los árboles ya color marrón, naranja y amarillo. Las nubes cubrían ligeramente el cielo que estaba de un celeste más que hermoso.

En la clase de educación física, que no resultó ser como Camilla dijo el primer día sino por grupos, nos separaron en dos equipos, uno de hombres y uno de mujeres, nos pusieron a caminar en la pista y me puse con Belén y Camilla. Iban parloteando sobre la dichosa fiesta, mientras yo miraba sobre mi hombro a Lucas, moverse tan grácilmente entre los chicos para meter gol en la portería.

-¿Y que opinas?- dijo Belén.

-¿Emm… de que?- dije apenada por no ponerles atención. Ambas voltearon y dirigieron su mirada a donde yo veía y sonrieron.

-¿Con que Russo, Huh?- dijo Camilla dándome un ligero codazo en el brazo.

-¡NO!- les dije esperando que me creyeran aunque tuvieran razón.

-¿Segura?-preguntó Belén son una sonrisa pícara en los labios. –No te culparía, es tan guapo, tan sexy, tan encantador…

Apreté la mandíbula fulminándola con la mirada mientras sus risas repiqueteaban como campanas en el aire.

-Relájate, Dest.- dijo Belén con la mirada divertida.- Solo estoy jugando. Yo tengo novio. Y lo amo con todo mi corazón.

-Si Dest, solo cuéntanos algo… ¿Te gusta, verdad?- preguntó Camilla con la mano sobre mi brazo.

Presioné mis labios y me encogí de hombros. Podía confiar en ellas. Sabía que podía confiar en ellas. Me detuve y ellas junto a mí, sonriendo para inspirarme valor. Entonces lo miré…

Estaba parado del otro lado de la cerca. Mirándome divertido. Como si me estuviera acechando. Una mirada que para nada se sentía inofensiva. Estudiando todos y cada uno de mis movimientos, sonriendo como alguien que esta cazando a su presa…

3 comentarios:

  1. siii valio la pena esperar hasta las 4:45 de la mañanaaaaaaaa!!!
    pero fue divertido esperar charlando!
    y el capitulo que te puedo decir, el besoo haaaaay que amor que divinooos!
    me encantoooooooo♥
    ya te dije que tenes que publicar pronto para que sepa que pasa!! pero te lo repito PUBLICA PRONNNTOOOOOOOOOO!!
    besoooooooooooooooos!

    ResponderEliminar
  2. Hola vi tu blog anunciado es muy chulo espero que escribas pronto me has dejado con la intriga pasate por mi blog: http://lavidade1naprincesita.blogspot.com/

    ResponderEliminar
  3. o buen blog me gusto debo decir que me lei todo lo que escribiste ya, espero con ansias el proximo capitulo.
    soy tu seguidora ya bueno linda historia pasate por mi blog ok? http://ingenua-marie.blogspot.com/
    bueno adios
    xoxo♥

    ResponderEliminar